Parado en el medio de la vida

Hace un par de años más o menos llegó a mis manos el disco de una españolísima Mala Rodriguez, que de hecho fue post aquí en Elegante Sport y creo tener un podcast de aquel disco y de esa misma época que si lo encuentro lo voy a subir. La cuestión es que de uno de sus temas se desprendía un verso que caló tan hondo en mí que comenzé a utilizarlo como regla de convivencia; el verso decía "...y me va mejor desde que deje de odiar".

No se si perdí por completo mi capacidad de odio pero reconozco que tuve una etapa bastante extensa de un enojo constante con cualquier cosa. Estaba enojado con mi trabajo, con mis amigos, con mis compañeros de trabajo, con mi esposa, con los deportes, con mis padres, con mis hermanos, con todos. Cuando observo desde el aquí y ahora aquella situación trato de pensar en el porqué y advierto que el lugar del "guerrero constante" es muy cómodo. Repasemos algunas características de algunos paladines de las pelis de acción donde hay detectives arrojados y valientes, corsarios seductores o héroes anónimos. No tienen ataduras. No solo físicas como esposa o hijos a los que casi siempre matan monstruosamente al comienzo del film, ni espirutuales, no creen en ningún dios, en ningún milagro y la única fe que tienen la tienen en su espada o en su pistola. Van entonces por la vida ganando adeptos que envidian, tal vez , esa liviandad que los acompaña.

Ese personaje es el que aparentemente ha adoptado Diego Maradona, a propósito hay un libro de uno de mis autores favoritos que es Charles Bukowsky llamado "Peleando a la contra".

El técnico de la seleción argentina piensa, y no es el único ni lo será, que una jauría de gestos adustos y de frases terminantes cuando no autoritarias y despectivas hacia sus interlocutores, son más importantes que el lugar que debe ocupar Demichelis cuando la pelota la lleva el rival por la franja derecha. Maradona estima que odiando y siendo intolerante va a poder ser más grande que su propia leyenda y no es así...con nadie fue así; Marilyn Monroe no fue en sí misma más grande que lo que hoy recordamos de ella, ni Lennon, ni Gandhi, ni el Che; ellos personas no pudieron dominar el monstruo que sus proezas lograron.

Maradona; como dicen Los Piojos, sos la cara de los "sin jeta" y fuiste el mejor jugador de futbol de todos los tiempos; tenes hijas y nietos, tenés a tu papá y a tu mamá, tuviste una buena esposa , tenés una buena persona como novia y estoy seguro que tenés amigos que te quieren de verdad. Por generaciones completas te se recordará y millones de pieles vestirán tinta con ese 10, con ese salto o con esos rulos...a mí me fue mejor desde que dejé de odiar. Ojalá que ganes el mundial.